Hace 20 años, contratamos un avión para hacer un sobrevuelo sobre Culiacán y encontramos 49 plantíos de marihuana en los alrededores. En una hora de vuelo, ubicamos cultivos de marihuana por todos lados: en las comunidades, a un lado de la carretera, detrás de la Zona Militar.
Todo Culiacán está sembrado de droga, desde hace muchos años, según lo confirmamos. Miles de personas se dedican a cultivar, a cosechar, a transportar y a comercializar la marihuana, sin que nadie pueda impedirlo. No hay poder gubernamental que pueda corregir la economía sustentada en el tráfico de drogas. Es el auténtico narco Estado mexicano desde hace décadas.
Sinaloa es un territorio perdido para el Gobierno de México. Ahí se perdió la lucha hace muchos años. Ahí los mafiosos gobiernan y mandan. Y de manera increíble ahí no hay muertos
En su momento, cuando hicimos el reportaje de aquel sobrevuelo para un periódico de la Ciudad de México, el entonces gobernador Juan S. Millán, nos dijo off the rércord: “Todo Sinaloa está sembrado de droga. Yo no puedo hacer nada. Lo sabe el Presidente de México (Ernesto Zedillo), lo sabe el Procurador General de la República y lo sabe el Ejército Mexicano. Pero si ellos no hacen algo, yo no puedo. No tengo hombres, ni tengo el poder para hacerlo”, nos dijo el Gobernador en su momento.
Sinaloa es el estado fallido.
Lo vimos el jueves pasado, cuando los narcotraficantes hicieron una demostración de poder nunca antes vista: Fusiles Barret de guerra, disparados en la vía pública. Ataques en 14 puntos al mismo tiempo. Una fuga masiva de 49 presos, sin hacer un solo disparo.
Sinaloa sigue siendo de los narcos.
Ahí ellos tienen el poder. Toman decisiones en el gobierno, controlan las corporaciones policiacas y mandan a los jueces. Los narcos de Sinaloa se han adueñado de las instituciones. Y tienen una base social en las comunidades y municipios, desde hace décadas.
Sinaloa es un territorio perdido para el Gobierno de México. Ahí se perdió la lucha hace muchos años. Ahí los mafiosos gobiernan y mandan. Y de manera increíble ahí no hay muertos. Este año Sinaloa ha estado tranquilo. Basta decir que en el 2019, de enero a septiembre, solo habían ejecutado a 618 personas. El estado está tranquilo, porque la plaza está arreglada. La plaza está arreglada porque el Gobierno deja trabajar a los narcotraficantes. No hay combate al crimen organizado y entonces no hay muertos, ni balazos. En Sinaloa todos viven felices y en paz, porque hay un acuerdo entre mafias y autoridades, desde hace 30 o 40 años.
Me tocó verlo hace 20 años, con aquel sobrevuelo cuando detectamos 49 plantíos de mota. Todo México lo vio el jueves 17 de octubre cuando el narco declaró la guerra y doblegó al Estado.
