Salazar: una vida detrás de la foto
El fotoperiodista venezolano Ronaldo Schemidt, residente en México, acaba de ganar con esta imagen el World Press Photo 2018. Aquí te contamos la historia de su joven protagonista
La dramática escena que inmortalizó el fotógrafo venezolano Ronaldo Schemidt forma parte de la iconografía de las protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro en mayo del año pasado en Venezuela. Casi un año después, la imagen acaba de ganar el premio principal del prestigioso World Press Photo en su edición de 2018.
El protagonista de la imagen es José Víctor Salazar, un joven de 28 años llegado desde el sur del país para unirse a las protestas en Caracas y que fue sorprendido por la explosión de una motocicleta de la Guardia Nacional. Salazar era uno más de los miles de jóvenes que protestaban contra el gobierno de Nicolás Maduro en medio de la crisis social, económica y política que todavía sigue viviendo el país.
«Lo vi correr mientras se quemaba. Después de que lograron calmar el fuego, él se paro y se fue caminando», relata Rolando Schemidt
Schemidt asegura en una entrevista con la BBC que todo pasó muy rápido, quizá en menos de un minuto. Lo vio correr mientras se quemaba y empezó a entender lo que pasaba cuando otros manifestantes lo lanzaron al suelo, lo taparon con ropa y le echaron agua. «Después de que calmaron el fuego, él se paró y se fue caminando. Ahí la situación se empezó a poner más tensa todavía y salí del lugar», cuenta el fotoperiodista venezolano de la Agencia France Presse (AFP).
Rolando Schemidt vive en México desde hace casi dos décadas, pero se encontraba en Caracas para reforzar la cobertura de las manifestaciones. Aunque está curtido en mil batallas, aseguró que esta imagen ganadora del World Press Photo 2018 es una de las más duras que ha tomado en sus 15 años de carrera.
Cubrí el incendio de la guardería ABC en México en 2009 y eso fue muy difícil. Pero lo impresionante de esta foto es que no llegué después de la tragedia, me tocó verla en directo».
El 4 de mayo del año pasado, cuando el fotógrafo retrató al joven en medio del fuego, se registró una de las jornadas de protestas más intensas de la historia de Venezuela. La imagen de Salazar en llamas recorrió la prensa local e internacional y muchos lo dieron por muerto. Pero no fue así. Al joven Salazar lo sometieron a 37 cirugías plásticas y estuvo internado en cuidados intensivos durante cuatro meses y medio, según explicó a BBC Mundo su médico cirujano, Garbis Kaakedjian.
Kaakedjian estaba en la sala de emergencias cuando una ambulancia llegó con Salazar. «Tenía el 72% de su cuerpo quemado. En ese momento pensé que, por la magnitud del caso, era difícil que pudiera salvarse». El cirujano señala que hubo muchas complicaciones médicas que incluyeron neumonía e infecciones. Pero Salazar logró recuperarse.
Salazar tenía el 72% de su cuerpo quemado y fue sometido a 37 cirugías plásticas. «Era difícil que pudiera salvarse», dice su cirujano. Pero lo logró
Sus hermanos ahora se encargan de él. Carmen, su hermana mayor, le dice a BBC Mundo que todavía debe asistir a terapias y no está en condiciones de trabajar. El joven no da entrevistas y prefiere pasar desapercibido. «Él siempre ha sido muy cómico. Y ahora cuando nos reunimos ha vuelto a contar sus chistes». La oleada de protestas de 2017 en Venezuela dejó un saldo de al menos 100 muertos, centenares de heridos y miles de detenidos.