Prueba superada: León 3, Matosas 2
Todos tenían un Matosas que superar. El Club León, el técnico Ambriz y la afición
El León ha sanado.
La presencia de Gustavo Matosas en el estadio de Zermeño, era más que un tema morboso. Era la oportunidad de encarar y derrotar al director técnico que nos acostumbró a ganar y que nos ayudó a recuperar la fe en el equipo. Lo sano entonces era enfrentar a Matosas, derrotarlo y superarlo emocionalmente. Y así fue.
El León 3, Matosas 2.
La presión era para todos.
Para el presidente del club, Jesús Martínez -que decidió dejarlo ir-, para el entrenador Ignacio Ambriz -que ocupa sus zapatos-, para los mismos jugadores -que saben de la historia-, y para los aficionados -que amaron al entrenador-.Todos tenían un Matosas que superar. Chucho Martínez necesitaba ganarle a Matosas. Ambriz necesita derrotar a Matosas. Y la afición deseaba demostrar que el equipo León es más grande que un director técnico.
Al principio, el equipo de Matosas nos dio un doble susto. El Atlético San Luis anotó el primer gol y se puso al frente en el marcador. Después el San Luis se puso 2 a 1 arriba, y en el estadio, había una sensación de miedo.
Pero los jugadores tuvieron una gran reacción. Ángel Mena metió el 2-2 y Jean Meneses metió el 3-2.
El triunfo del León hace terrenal a Matosas. Le quita ese halo de divinidad que creíamos tenía cuando nos dio el Bicampeonato.
El triunfo fue casi un acto de sanación. Un resultado liberador para todos. El León exorcizó a ese demonio del pasado que no nos deja disfrutar del equipo del presente de Nacho Ambriz que juega igual o mejor que el viejo equipo de Matosas. León 3. Matosas 2.
El León ha sanado.