“Cambia el capataz pero el finquero sigue siendo el mismo”
El EZLN responde con desprecio a la victoria de AMLO y no formará parte de su coro de aduladores al que se han sumado ya Donald Trump, Carlos Slim o el propio Vicente Fox
Bajo el título Píntale caracolitos a los malos gobiernos pasados, presentes y futuros, el EZLN compara la elección ganada por López Obrador con un partido de fútbol: “El dueño del balón no pierde, no importa qué equipo gane. La gran final tan esperada y temida concluyó y el equipo vencedor recibe, con falsa modestia, los clamores de los espectadores. ¿Cuántas veces ha escuchado usted eso? Muchas, ¿vale la pena contarlas? Las derrotas reiteradas”, señala el comunicado firmado por los subcomandantes Galeano (antes Marcos) y Moisés.
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) respondió con desprecio al triunfo de López Obrador en las elecciones de hace una semana, y advirtió de que el político tabasqueño, de 64 años, será una decepción más.
“Podrán cambiar de capataz, los mayordomos y caporales, pero el finquero sigue siendo el mismo”, asegura la comandancia zapatista en un comunicado.
“El dueño del balón no pierde, no importa qué equipo gane”, asegura la comandancia zapatista en un comunicado
La reacción del movimiento indígena que conquistó al mundo con sus pasamontañas y escopetas de madera durante el levantamiento de 1994 ha sido la nota única discordante en un coro que aplaude la llegada de la izquierda al poder.
Andrés Manuel López Obrador ha recibido el aplauso de los líderes del mundo, incluido Donald Trump, los candidatos derrotados, sindicalistas, intelectuales y hasta los empresarios. Al reconocimiento colectivo se han sumado Carlos Slim y la patronal, enfrentados con él durante su campaña, así como sus enemigos Carlos Salinas, Vicente Fox o Felipe Calderón. Los zapatistas se mantienen firmas y no formarán parte del nuevo coro de aduladores de AMLO
La respuesta ha sido coherente con el enfrentamiento que mantienen desde hace años Obrador y el subcomandante Marcos. Un distanciamiento que comenzó en la campaña de 2006, siguió en la de 2012 y llega a la actualidad, según informa el diario ‘El País’. En estos años, los zapatistas han acusado a Obrador de ser “enemigo de los indígenas”, “representante de la falsa izquierda” o de estar rodeado de colaboradores que fueron responsables de matanzas como la de Acteal.
