«Nunca olvidaré cuando la cabeza del cocodrilo salió del agua»
Un cocodrilo de 3,5 metros atacó a una turista estadounidense de 18 años en la playa del Hotel Marriott de Puerto Vallarta
Pánico a medianoche en la playa del Hotel Marriott de Puerto Vallarta. Un cocodrilo de 3,5 metros atacó a una turista estadounidense de 18 años que pasaba las vacaciones en el complejo. La joven Kiana Hummel se recupera de las mordeduras en un hospital.
«Sinceramente, nunca olvidaré cuando la cabeza del cocodrilo salió del agua. Me quedé en estado de ‘shock’. Fue sin duda una de las cosas más locas y aterradoras que he vivido», narró Sarah Laney, testigo del suceso.
CROCODILE ATTACK: A Bay Area teenager vacationing in Puerto Vallarta was attacked and dragged into the ocean by a 12ft crocodile. This happened at the Marriott resort.
Thankfully, Kiana Hummel survived. She is currently undergoing surgery at Marin General. pic.twitter.com/jtEMHncaxY
— Liz Kreutz (@ABCLiz) July 27, 2021
La mordedura le desgarró el muslo
La turista se encuentra fuera de peligro y no ha perdido ningún miembro. El ataque le causó un desgarro en los músculos del muslo, por lo que requerirá de una segunda cirugía para corregir esos tejidos. Una amiga de la chica ha empezado a recolectar fondos a través de una campaña en GoFundMe para ayudarla a pagar la operación.
Kiana Hummel explicó que el ataque se produjo a medianoche, cuando ella y una amiga se disponían a meterse en el mar. El animal se lanzó sobre ella, le agarró la pierna derecha y empezó a arrastrarla hacia el agua. Ella propinaba golpes al reptil para tratar de escapar. Logró deshacerse y cuando pensaba que todo había terminado, el cocodrilo agarró su tobillo izquierdo y volvió a empujarla hacia el mar.
Salvada por unos turistas
Unos turistas se acercaron a ayudar la joven hasta que finalmente consiguió escaparse del depredador. Una vez a salvo, fue trasladada a un hospital local. Por suerte no perdió ninguna extremidad en el ataque. La víctima ha explicado que los cuerpos de emergencia tardaron unos 45 minutos en llegar. Además, la administración del hospital al que la llevaron le exigió pagar miles de dólares para ser atendida.