‘Narco’ leonés destapa la conexión futbolera de ‘El Chapo’
Tirso 'El Futbolista' Martínez, detenido en León y actual testigo de la Fiscalía, indicó en el juicio cómo compró los equipos de Irapuato y Celaya. Y contó que la propia Federación le propuso en 2006 adquirir sus franquicias por 10 millones de dólares
Las conexiones entre el narcotráfico y el futbol mexicano quedaron al descubierto en el juicio que se celebra en Nueva York contra Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán. Uno de los testigos de la Fiscalía, muy conocido en los bajos fondos de León, detalló cómo compró con dinero procedente de la venta de cocaína varios equipos mexicanos, entre ellos los de Irapuato y Celaya. 
Tirso ‘El Futbolista’ Martínez, conocido ‘narco’ leonés y uno de los principales distribuidores de cocaína en Estados Unidos para los cárteles mexicanos, explicó ante la Corte de Brooklyn las inversiones millonarias que realizó en varios equipos. Y manifestó que llegó a ser el propietario de franquicias profesionales en las ciudades de Querétaro, Celaya, Irapuato, La Piedad y Mérida. Todas adquiridas con dinero del tráfico de drogas.
Martínez compró el club de La Piedad por 2,2 millones de dólares y lo vendió años más tarde en 10 millones de dólares, con una ganancia neta de cuatro millones tras liquidar a jugadores y empleados
Cuestionado por el abogado defensor William Purpura, Martínez precisó que adquirió el equipo ‘Venados’ de Yucatán por entre 700 mil dólares, y el de ‘Reboceros’ de La Piedad por 2.2 millones de dólares. Y apuntó que en 2004 vendió el equipo de La Piedad en 10 millones de dólares. Luego de liquidar a jugadores y empleados, Martínez logró una ganancia neta de cuatro millones de dólares por esa transacción.
Una vez que la Federación Mexicana de Futbol descubrió en 2006 que Martínez, sospechoso de participar en el tráfico de drogas, poseía franquicias de futbol, este organismo le propuso comprar sus activos en este deporte por 10 millones de dólares.
Conocido como ‘El Futbolista’ justamente por su afición a este deporte, Martínez logró obtener ingresos brutos por valor de 50 millones de dólares por sus actividades en el tráfico de drogas tan solo entre los años 2000 y 2003. Martínez confesó que llegó a trabajar para los Cárteles de Sinaloa y de Ciudad de Juárez entre 1995 y 2003. Y que era muy aficionado a las peleas de gallos, donde apostaba fortunas.
«Me gasté todo el dinero en apuestas de gallos, caballos, propiedades, autos, casas, fiestas y mujeres», dijo Martínez. Que confesó que ya solo le quedan cinco activos, todos en México: una casa, un rancho y tres terrenos, con un valor de unos tres millones de dólares.
Detenido en 2014 en León, Martínez fue extraditado un año después a Estados Unidos, donde se declaró culpable de delitos que podrían costarle una pena máxima de cadena perpetua y una mínima de 10 años de prisión. Debido a su colaboración como testigo de la Fiscalía contra ‘El Chapo’, podría recibir una condena reducida. Y deberá también pagar una multa de dos millones de dólares.
