León se ha convertido en una de las ciudades más inseguras del país. De nada ha servido la «experiencia” que nos vendió en la pasada campaña electoral Héctor López Santillana para ser reelegido como presidente municipal. De nada ha servido su promesa de que “nos cuidaría como a su familia” .
Hoy estamos notoriamente más afectados por el tema de la inseguridad. En estos últimos días se conocen, casi por horas, nuevos nombres de personas que sufren de asaltos, les quitan relojes, carteras, bolsos y efectivo.
El presidente municipal ha mostrado como avestruz, temeroso, errático y hasta sin tino. No ha enfrentado el serio problema que padecemos los habitantes de León como se merecería hacerlo. Ha carecido de imaginación para no solo cambiar de estrategia o para implantar nuevas medidas, sino hasta para el mismo manejo de los medios. Parece no entender siquiera la magnitud de esta crisis y, en consecuencia, actuar de manera diferente.
En un intento por atajar los testimonios ciudadanos, vía redes sociales, de los delitos que hemos sido objeto; hizo un recorrido de medios para criticar y medio justificar que al no denunciar o llamar al 911 no estaban en la posibilidad de actuar.
Sufriendo lo que sufrimos a diario en León es que me atrevo a citar a Thomas Macaulay: «Los políticos tímidos e interesados se preocupan más de la seguridad de sus puestos que de la seguridad de su ciudad”
¡Increíble su torpeza! El 80% de la solución de un problema es entenderlo. Y claramente Héctor López no lo entiende. El verdadero problema es que el delito se comete. Es lo que hay que resolver. El porqué sucede esto, el cómo se debiera notificar a la autoridad y el formulismo para juzgar a los culpables es parte de los análisis y otras acciones que conlleva la problemática.
Héctor López debe entender y actuar en consecuencia, ya que al 78.2% de los leoneses mayores de 18 años percibimos a León como una ciudad insegura. Lo que no sucede con Aguascalientes (58.6%) o con Querétaro (56.8%). Pero la cifra se eleva a un escalofriante 84.4% de quienes nos sentimos inseguros en las calles.
La razón es clara de entender. León tiene una tasa de prevalencia delictiva del 36.1%. Es decir, de los mayores de 18 años que sufren de un delito por cada 100 mil habitantes. Una de las más altas del país, por cierto. Lo que, en consecuencia, provoca todo lo anterior.
Los leoneses nos sentimos inseguros ya que sufrimos tres delitos de alto impacto que merman una percepción positiva: robo o asalto en la calle o transporte público (27.3%), robo total o parcial de vehículo (19.1%) y extorsión (15%).
Nos afecta en nuestro ánimo sufrir y conocer a diario ejecuciones y asesinatos en plena luz del día y en cualquier lugar de la ciudad. En 2018 se registraron 350 homicidios dolosos, es decir, un promedio de 29.16 mensual. La mala noticia es que en los primeros dos meses del 2019 ya se tiene un acumulado de 71 homicidios dolosos. Es decir, un promedio de 35.5 por mes.
Pero sí analizamos la tendencia según los primeros dos meses del año 2018, cuando se registraron solo 41 eventos, con un promedio de 20.5 por mes, nos crea la perspectiva de que en el año 2019 será impuesto un nuevo récord histórico de asesinatos dolosos en León. La razón de raíz de nuestro padecer, lo peor de todo, es la altísima y temida ‘cifra negra’ para la autoridad. Es decir, el total de delitos que no tienen castigo alguno que en la ciudad de León es del 95.3%.
Cuando en tu ciudad es más probable que un delincuente no sea castigado por su delito, la acción natural del delincuente será seguir delinquiendo y la sociedad seguir sufriendo de esta situación y sentirse inseguro, violentado en su derecho de vivir con tranquilidad para con sus bienes y familia.
Pero cómo no se va a dar este nivel de ‘cifra negra’ y de precepción de inseguridad, cuando acepta la autoridad que la policía tarda más de 25 minutos en responder un llamado de urgencia. Al ser esta cifra un promedio, tenemos que habría unas de 5 minutos y otras de más de 60. Entonces, la pregunta natural de la población es: ¿Para qué llamar al 911? Si la policía no llegará.
Para qué hacerlo, cuando es notorio una falta de capacitación y, sobre todo, de coordinación entre el 911 y la corporación policiaca. Cuando no hay, incluso, comunicación directa con los primeros respondientes para en su caso poder explicarles la situación de personas encerradas en un local comercial sufriendo un evento en ese momento.
Por qué no actúa la policía municipal a iniciativa propia. Si conoce de estos eventos por víctimas cercanas al alcalde y por redes sociales, por qué no pasa a investigar y busca acabar con la banda del HEB/Dublë/Orangerie/VIPS. No puede esperarse a que la Procuraduría del Estado, la cual está rebasada, concluya investigaciones que incluso no comenzaron por no haber denuncia. Debe actuar por iniciativa propia, ya que somos los ciudadanos quienes vivimos y padecemos la inseguridad día a día. Debe romper el círculo vicioso en el que nos encontramos. Sufro un delito, no denuncio por incapacidad de la autoridad, no hay castigo, sufro nuevamente de un delito. Lo que es altamente beneficioso a los delincuentes, y muy perjudicial al ciudadano y a la autoridad.
Los principales indicadores de desempeño que Héctor López Santillana debe cuidar son: la Tasa de prevalencia delictiva por cada 100,000 habitantes mayores de edad y el porcentaje de percepción de inseguridad de los habitantes mayores de edad. Solo con la disminución de estos indicadores podrá justificar que está cumpliendo con lo mandado en el Art. 115 fracción III inciso H y el Art. 21 párrafo Noveno de la Constitución. Pero el resultado más importante que tendría es para con nosotros los ciudadanos, ya que viviríamos en una ciudad notoriamente más segura. Lo cual urge de sobremanera.
Sufriendo lo que sufrimos a diario en León es que me atrevo a citar la máxima de Thomas Macaulay: “Los políticos tímidos e interesados se preocupan más de la seguridad de sus puestos que de la seguridad de su ciudad”.
- Datos Fuente: ENVIPE-INEGI 2018 Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública – cifras municipales 2018 y 2019.
