La caravana rompe el cerco y entra en México
Más de dos mil migrantes, en su mayoría hondureños, lograron burlar las medidas de seguridad e irrumpieron por la fuerza en territorio mexicano desde la frontera con Guatemala
Más de dos mil migrantes, en su mayoría hondureños, rompieron a la una la tarde del viernes una valla policial frente al portón que antecede a la frontera entre Guatemala y México. Colocaron por delante a niños y mujeres para empujar la reja y lograr acceder a territorio mexicano.
Ante la respuesta de la Policía Federal, la caravana de migrantes hondureños, compuesta por entre 4 mil y 5 mil personas, quedó varada en el puente fronterizo de esta ciudad luego de que una parte de ellos quiso irrumpir de manera desordenada hacia México. Antes, los migrantes se saltaron y prácticamente derribaron un cerco policiaco montado en la ciudad de Tecún Umán, Guatemala.
Durante 15 minutos, cientos de migrantes lograron cruzar al municipio de Suchiate en Chiapas. Los hondureños fueron en grupo hasta el puente donde se encuentra el cruce entre ambos países. Mientras tanto, la policía guatemalteca se limitó a ver el paso de los cientos de migrantes. En el lado mexicano se han instalado aduanas fronterizas en un intento de contener esta entrada masiva.
Cientos de hondureños, salvadoreños y guatemaltecos que conforman la Caravana Migrante se enfrentaron y agredieron a elementos de la Policía Federal, que intentaban poner orden. Los disturbios se registraron luego de que por varios minutos los migrantes pasaron a las mujeres y niños por arriba de la cerca que divide la frontera de México y Guatemala.
Posteriormente, decidieron romper la valla por lo que elementos de la Policía Federal intentaron contener a los migrantes que salieron de Honduras y a los que se han sumado miles más que quieren salir de sus países de origen en busca de alcanzar el sueño americano y así tener una mejor vida.
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, afirmó que la caravana migrante procedente de Honduras es “una situación extraordinaria que requiere atención urgente por parte de todos los gobiernos de la región, así como de los organismos internacionales”.