Kabul: el Saigón de Biden
El repliegue militar de Estados Unidos de Afganistán, marcado por el caos de las evacuaciones, comienza a golpear la imagen del presidente
El 30 de abril de 1975, Saigón, hasta entonces capital de Vietnam del Sur, caía ante la entrada de las fuerzas comunistas del norte, marcando el final de una intervención militar de casi dos décadas. Fue un momento humillante. La guerra en Vietnam se considera la primera derrota militar de Estados Unidos. Y ahora Kabul.
El repliegue militar de Estados Unidos de Afganistán, marcado por el caos de las evacuaciones internacionales tras la toma de Kabul por parte de los talibanes, ha comenzado a golpear la imagen del presidente norteamericano, Joe Biden, que ha recibido en las últimas semanas incluso comparaciones con la fallida guerra de Vietnam.
Los sondeos venían situando el respaldo a Biden por encima del 51 por ciento, pero los estudios conocidos en los últimos días comienzan ya a reflejar los efectos colaterales de la crisis afgana. Solo un 41 por ciento aprueba su gestión en términos generales, según una encuesta de la Universidad de Suffolk para el ‘USA Today’.
Críticas a la forma de abandonar Afganistán
Una mayoría de los estadounidenses se muestra a favor de sacar a las tropas de Afganistán, pero más de seis de cada diez (62 por ciento) critican la forma en la que se ha llevado a cabo. Solo un 26 por ciento respalda la gestión de esta retirada, que bajo la anterior Administración se anunció para marzo de 2021 y Biden retrasó en un principio hasta el 11 de septiembre.
Sin embargo, no será Bush sino Biden quien pueda pagar las consecuencias políticas de la gestión de la salida. El 52 por ciento de las personas entrevistadas creen que el hecho de que el actual mandatario reforzase la presencia de tropas en Kabul demuestra que es culpable de lo que está ocurriendo.
Uno de los argumentos esgrimidos por Biden para justificar la salida de Afganistán es su excesiva duración, 20 años. Arrancó en pleno duelo de los atentados del 11-S bajo la Presidencia de George W. Bush, en quien recaería la principal responsabilidad de esta guerra para un 62 por ciento de los encuestados por la Universidad de Suffolk. Sin embargo, no será Bush sino Biden quien pueda pagar las consecuencias políticas de la gestión de la salida.