¡Imaginemos cosas chingonas!
Un país con crecimiento económico y combate a la pobreza
Imaginemos un México fuerte y poderoso. Imaginemos un país como potencia económica. Imaginemos un México con un ingreso per cápita de los mejores del mundo. Un país con una economía fuerte. Un México socio comercial de las grandes potencias mundiales. Imaginemos cosas chingonas, como dijo ‘Chicharito’ en el pasado Mundial de Futbol. Una frase atrevida y retadora que puede aplicarse para todos los sectores de la sociedad.
Imaginemos un país con educación de alto nivel. Un país con un sector salud eficaz de primera. Un México con políticas públicas de combate a la pobreza que permitan el desarrollo de las personas. Un país con buenos sueldos y empresas fuertes. Un país con crecimiento económico del 8 o 10 por ciento. Un México que sea ejemplo democrático y respetuoso de los derechos humanos.
La idea de imaginar cosas chingonas aplica para todo lo que es México.
Tenemos que visualizar a un país grande que compita con otros países, en todos los ámbitos, no solo en el futbol. Un país que apueste al desarrollo de las tecnologías, de la ciencia y la cultura. Una nación que tenga visión de futuro y que esté dispuesta a apostar por el crecimiento de todos. Un México que compita contra Polonia, contra Arabia, contra Francia, contra Inglaterra, contra todos.
Tenemos que imaginar lo mejor para México. No podemos estar pensando en el quinto partido en el comercio internacional. No podemos estar soñando con llegar a cuartos de final de la economía, sin imaginarnos llegar a la semifinal o a la final. No debemos quedarnos en la mediocridad de solo clasificar al Mundial de la tecnología.
México tiene que pensar en ser de los primeros lugares mundiales en salud. En llegar a la semifinal de la educación y a la final del comercio internacional.
Imaginemos cosas chingonas. Un país que sea destino turístico mundial. Un país que ofrezca oportunidades de inversión para las grandes empresas. Un México con crecimiento sostenido en el Producto Interno Bruto. Que sea centro logístico de la economía de América. Que venda productos al resto del mundo. Que aproveche su ubicación geográfica, junto a Estados Unidos. Y que sea socio comercial de la economía más fuerte del mundo.
México debe estar en las finales. México debe ocupar los primeros sitios de todos los campeonatos. Imaginemos un México ganador. Un México chingón. Un México campeón del mundo.
¡Vamos México!