«Hijo, escucha, tu madre está en la lucha»
Miles de mujeres mexicanas marcharon este viernes en la Ciudad de México para exigir a las autoridades la resolución de estos casos y clamar justicia para los miles de desaparecidos
Hay madres que no tienen ganas de festejar. Solo quieren encontrar a sus hijos desaparecidos y exigen al Gobierno mejores resultados en las investigaciones sobre estos casos. Centenares de ellas marcharon este viernes en Ciudad de México.
Tras realizar por octava edición una marcha desde el Monumento a la Madre, las organizaciones de familiares de personas desaparecidas procedentes de veinte estados de la República hicieron público su enojo e indignación por la nula eficiencia de las indagatorias sobre estos casos, pero también su dolor por no saber nada de sus hijos, esposos, hermanos y padres.
«Las desapariciones y la impunidad en la que se mantienen los casos son deliberadas. Para lograr tenernos paralizados y aterrorizados, porque se han dedicado a vender este país», aseguró el obispo de Saltillo
El obispo de Saltillo, Raúl Vera, enfatizó durante su mensaje que los miles de casos de desaparición que hay en el país son responsabilidad de una serie de “gobiernos criminales” que han recurrido a este crimen de forma deliberada, para usarlo como una herramienta de control social.
“Esto de las desapariciones forzadas y la impunidad en la que se les mantiene es deliberado, para tenernos paralizados y aterrorizados, porque se han dedicado a vender este país”, aseguró el obispo.
Jan Jarab, representante en México de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, indicó por su parte que el 10 de mayo, en vez de ser un día de alegría, se ha convertido en una jornada de movilizaciones “producto de la tragedia que enfrenta México en materia de desaparición”.
A la manifestación acudieron también las madres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos desde septiembre de 2014. Miles de personas comenzaron a reunirse entorno al Monumento a la Madre, portando mantas con la foto de sus hijos e hijas desaparecidas, y en medio de consignas como “dónde están, nuestros hijos, dónde están”; “hijo, escucha, hijo escucha, tu madre está en la lucha”; “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.