El VAR: un arbitraje justo
La tecnología es un monstruo que no se puede evitar y el fútbol lo sabe, ya que a lo largo del tiempo, en este juego se han implementado herramientas para hacer de él los partidos más justos.
El pasado enfrentamiento del Club León contra Las Chivas fue digno referente del uso de la tecnología y esto tras el utilizar a los árbitros asistentes de video (VAR por sus siglas en inglés).
En el 2016 ya se escuchaba hablar del VAR pero no era oficial el que se quedará en las canchas de las ligas, ya que tenía hasta este año (2019) para ser completamente aprobado por las cuatro asociaciones de fútbol británicas y por la FIFA.
No todos los aficionados están contentos con el VAR, ya que consideran que al fútbol le quitaron la esencia, la emoción y el coraje en tribunas cuando se marcan las faltas.
Ese mismo año quedó inmortalizada la primera intervención del VAR y por supuesto la actuación del árbitro húngaro, Viktor Kassai, pues fue el primero en pitar un penal tras ver la repetición de la jugada en video, durante la semifinal de la Copa Mundial de Clubes entre Atlético Nacional de Colombia contra el equipo japones Kashima.
Pero no todos los aficionados están contentos con esta nueva aplicación de arbitraje, pues consideran que a fútbol le quitaron la esencia, la emoción y el coraje en tribunas cuando se marcan las faltas.
Actualmente el VAR es utilizado por importantes ligas, entre ellas la Liga Mexicana y la Liga Española, como una herramienta esencial de la justicia en el campo.
Muchos se preguntan qué hubiera sido de aquellas faltas históricas como “La mano de Dios” de Diego Armando Maradona en el partido entre Argentina e Inglaterra en los cuartos de final de la Copa Mundial de Fútbol del 86 o del “No era penal” en los cuartos de final en Brasil 2014, donde Holanda eliminó a México tras cobrar un penal con una falta que jamás existió.
Justo los anteriores casos son los que de alguna manera obligaron a las asociaciones de fútbol a jugar con el VAR en la cancha y el no permitir ninguna irregularidad al momento de los partidos.