El sacerdote de los títeres, muerto en la pandemia
Su compromiso con Dios lo llevó a crear un sinfín de estrategias para que la gente se acercara a la iglesia
La semana pasada la colonia San Pedro de los Hernández sufrió la pérdida del padre Eduardo. Él oficiaba misa en la parroquia San Pedro Apóstol. Su muerte conmocionó a los feligreses de León.
El padre Lalo era muy querido y respetado en San Pedro de los Hernández, su actitud innovadora y su compromiso con Dios, lo llevó a crear un sinfín de estrategias para que la gente se acercara a la iglesia, entre ellas, tenía a ‘Pecas’, un títere que le ayudaba a oficiar misa para niños.
En ninguna parroquia de León se había visto esto. Si bien es sabido que las misas para los niños se realizan todos los domingos a las 8 am, pero el sermón llega a ser tedioso y fácilmente los pequeños pierden el interés y no prestan atención. Con el padre Lalo era diferente.
Según los colonos, era fascinante ver como el padre Lalo platicaba con los niños a través de Pecas. Los sermones eran divertidos y el único objetivo era acercarlos a misa.
El padre Lalo y Pecas se crearon fama entre las iglesias católicas de León y sus feligreses, pues las recomendaciones para llevar a los peques a su parroquia en San Pedro de los Hernández, cada vez crecía más.
Así fue como el cura Eduardo cambió los estereotipos que la mayoría de los niños se imagina al llegar a un templo. Cuando la misa para ellos comenzaba la parroquia se transformaba en un circo y la diversión acompañada de Dios no paraba.
El padre Lalo predicaba en las calles por cuarentena y murió de COVID-19
Nadie se iba a imaginar que su audacia e innovación para impartir misa lo orillaron a su deceso. En plena pandemia el padre murió de una neumonía, pues en la cuarentena por coronavirus salió a las calles a oficiar misa. Cinco días permaneció hospitalizado hasta que la triste noticia se dio a conocer.