Se lo tenía muy calladito. El ex presidente de León, Ricardo Sheffield, le regaló a los masones de León un terreno de 4 mil 500 metros en la colonia Provivienda Obrera El Salto (cerca de Flores Magón).
No es un terreno pequeño. En ese lote fácil caben 40 casas de Infonavit. No es cualquier regalo. Eso ocurrió en junio de 2011 y la donación la hizo el Ayuntamiento de León.
En su momento, Sheffield nunca dijo que era para la Gran Logia de Guanajuato, una de las organizaciones de la masonería en Guanajuato. En el acta de la sesión de Ayuntamiento (y en el Periódico Oficial del Estado), solo aparece como una donación a la asociación civil Guillermo Romero, la cual es de la masonería, pero se ocultó.
¿Qué intereses tenía o tiene Sheffield con la masonería? Se desconocen, pero no deben ser menores ya que de trata de un terreno que debe costar arriba de 12 millones de pesos.
La donación es realmente extraña. Es bien sabido en León que el actual Procurador Federal del Consumidor está más ligado a la ultraderecha guanajuatense y entonces debería ser adversario de la masonería, pero hizo en regalo incluso ocultándola a su propio partido de entonces el PAN.
Lo más grave es que Sheffield no regaló un terreno suyo -que en todo caso está en libertad de hacer lo que quiera con su dinero-, sino que obsequió un terreno del Municipio de León y provocó un daño al erario público.
Se pasó de rosca.
