El lobo mexicano dejó de estar en la categoría de extinción
El mamífero dejó de estar en la categoría de extinto para pasar a la categoría de peligro de extinción, de acuerdo a la norma 059 de SEMARNAT
El lobo mexicano dejó de estar en la categoría ‘extinto’, después de grandes esfuerzos por ambientalistas y asociaciones para su conservación.
A finales de la década de los 70 el Lobo Mexicano se había declarado extinto de la vida salvaje, principalmente por la caza indiscriminada que sufría esta especie.
Después de 40 años, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, pasó a la especie a categoría de en peligro de extinción, de acuerdo a la norma oficial mexicana 059.
Hasta la fecha se han realizado 12 liberaciones y ya han nacido aproximadamente 25 cachorros en su hábitat natural
Esto fue gracias a al Estado de Chihuahua, que desde el año 2011 ha llevado su esfuerzo al máximo en la Biosfera de Janos, para la reintroducción de esta especie a la vida salvaje.
Hasta la fecha se han realizado 12 liberaciones y ya han nacido aproximadamente 25 cachorros en su hábitat natural.
En 22 años solo se habían logrado reproducir 146 ejemplares, de ellos una cuarta parte vive en la zona de montañas en Sonora, Chihuahua, Durango, Zacatecas y Nuevo León. Su cuidado y preservación está en manos de 15 instituciones mexicanas.
Datos del Lobo Mexicano
El lobo es un depredador que puede llegar a medir 1 metro con 35 centímetros, con una altura de 80 centímetros y su peso puede ser de 45 kilos como máximo, y era considerado el eslabón más fuerte de la cadena alimenticia hasta su extinción, controlaba las poblaciones de cingulados y venados.
Al controlar los pastos de recuperación, permitían el crecimiento sano de las plantas. Cada lobo consume casi 3 kilos de carne al día y en vida silvestre puede dejar de comer hasta 2 semanas.