El Congreso dice adiós al fuero
Primer paso para el fin de la impunidad de la clase política, incluido el presidente de la República, que deberá ser ahora refrendado por el Senado para que pueda entrar en vigor
Histórica decisión del Congreso. El adiós al fuero de la clase política mexicana y los funcionarios públicos, incluido el presidente de la República, está cada vez más cerca. La Cámara de Diputados abrió hoy la puerta a una de las peticiones históricas de la ciudadanía y en la que se han refugiado cientos de políticos y funcionarios corruptos para eludir sus responsabilidades penales.
El PRI cambia de opinión impulsado por el nuevo aire electoral de Meade y aprueba una reforma que era ya un clamor ciudadano
Los legisladores de todos los partidos aprobaron la modificación de ocho artículos de la Constitución para ceder ante un clamor popular que se ha agudizado con la multiplicación de políticos envueltos en escándalos de corrupción. La reforma que pretende despojar del fuero a los servidores públicos tendrá que ser aprobada ahora por el Senado y la mayoría de Congresos locales para que pueda entrar en vigor.
Fue el PRI, el partido en el poder y quien tiene control de las dos cámaras del Congreso, quien finalmente se decidió a romper el cerrojo del fuero. En parte impulsado por su candidato presidencial, José Antonio Meade. Uno de los temas centrales de su campaña ha sido el combate a la corrupción e incluso llegó a prometer que de ganar se convertiría en el primer mandatario sin inmunidad.
El presidente de la República podrá ser sometido a juicio político al igual que todos los altos funcionarios del Estado
López Obrador, líder de Morena, y el panista Ricardo Anaya también se habían mostrado públicamente favorables a la eliminación del fuero. Esa coincidencia entre los principales partidos mexicanos hizo que este jueves se aprobara el dictamen con el voto unánime de los 370 diputados presentes, una mayoría calificada para reformar la Constitución.
El dictamen de modificación a los artículos 17, 61, 74, 108, 110, 111, 112 y 114 de la Constitución señala que el presidente “podrá ser sujeto de juicio político”. Para la aplicación de sanciones al titular del Poder Ejecutivo, la Cámara de Diputados será la encargada de proceder a la acusación respectiva ante el Senado. Esta tendrá que votarse por una mayoría calificada y dándole audiencia al imputado, según informa ‘El País’.
Las reformas constitucionales también eliminan la inmunidad a los legisladores, ministros de la Suprema Corte de Justicia, magistrados del Tribunal Electoral, consejeros de la Judicatura Federal, secretarios de Estado, el Fiscal general y los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), la autoridad electoral.
Soplan tiempos de cambio impulsados por el huracán electoral. Pero habrá que esperar a que el Senado de el visto bueno a una reforma que puede considerarse como uno de los grandes triunfos de la sociedad civil en los últimos años.
