Los foquitos de Navidad son ahora un atractivo. Son vistosos y son muchos, por todo el centro de la ciudad. Por fin quitaron los viejos adornos navideños de un leoncito de escarcha.
Esos leoncitos, que estaban desde los años ochenta, tenían una nochebuena y una veladora en Navidad, y una bandera con el Grito. Ya fueron jubilados esos viejos adornos de Navidad de León. Ahora la apuesta es más atrevida. En el centro de la ciudad se ha montado un túnel de Navidad, con cientos de luces blancas, que están llamando la atención de los ciudadanos.
“Sentí mucha alegría cuando pasé por ahí”, dijo el señor Juan al salir de ese túnel instalado a un lado del jardín principal. Se trata de un paseo con un túnel, un Nacimiento y un pasillo rodeado de renos grandes. El edificio de la presidencia municipal también está adornado de manera distinta con foquitos y nochebuenas, y con un árbol navideño en el patio principal.
La gente se toma fotos navideñas. “Me gustó mucho”, dijo la señora Estela. Cada fin de año, hay personas que suelen hacer un paseo por la ciudad para contemplar los adornos navideños. Este año, el paseo para contemplar las luces navideñas debe comenzar por el centro de la ciudad.