Conmoción en León por el asesinato del traumatólogo Gerardo Macías
El doctor y profesor de la Universidad de Medicina recibió cinco balazos en el interior de su vehículo sobre el bulevar Morelos a la altura del fraccionamiento UrbiVilla del Roble
El asesinato del prestigioso traumatólogo y ortopedista Gerardo Gabriel Macías, de 60 años, ha golpeado a la sociedad leonesa. Hay dolor y rabia en la profesión médica por el crimen de un colega muy querido por todos y que tenía su consulta en el Hospital Aranda de la Parra.
El suceso ocurrió pasadas las dos de la tarde de este miércoles en la esquina del libramiento José María Morelos y la calle Campestre Níspero de la colonia UrbiVilla del Roble. Gerardo Gabriel viajaba en un Chevrolet Spark rojo cuando fue interceptado por pasajeros de un auto Jetta negro. En ese momento, y según algunos testigos, uno de los hombres que viajaban en el coche le apuntó directamente con una pistola y le disparó en repetidas ocasiones.
Un hombre se le acercó por la ventana del copiloto y le disparó a sangre fría. Su muerte ha desatado una oleada de rabia y dolor en la sociedad leonesa
Alumnos, pacientes, colegas y amigos han mostrado su rabia y consternación en las redes sociales. Su muerte ha provocado una avalancha de muestras de dolor y cariño para su familia y una profunda pena por su inesperado asesinato. Y la exigencia de justicia para dar con el paradero de los autores del horrible crimen de Gerardo.
Como una losa cayó la noticia de su muerte en la Facultad de Medicina de León, donde Gerardo estudió de 1976 a 1981. El personal administrativo, médico y estudiantil ha lamentado profundamente la pérdida de su colega y profesor. Un hombre amable y entregado a su profesión, como lo recuerdan todos los que tuvieron la oportunidad de conocerle.
El doctor Gerardo tenía su domicilio en la zona centro de la ciudad de León y antes de ser asesinado fue visto con otro hombre en el Chevrolet Spark de color rojo en el que perdió la vida. El acompañante de Gabriel se bajó a un comercio de la zona y luego se escucharon las detonaciones.
Un hombre se acercó hasta el vehículo de Gerardo y desde la ventana del copiloto le disparó cinco balazos en la cabeza, cuello y tórax. Murió en el acto. Cuando llegaron las asistencias ya no presentaba signos vitales. En una emotiva misa, médicos, estudiantes y familiares del doctor Gerardo Gabriel Macías Hernández le dieron el último adiós la tarde de este jueves.
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