‘Ciao, Vale’
'Il Dottore' Rossi corrió en Cheste su última carrera. Se va el mejor piloto de la historia del motociclismo con 9 títulos mundiales y 115 victorias
‘Il Dottore’ Valentino Rossi se despidió se domingo de las pistas en el circuito español de Cheste. Pero el legado del nueve veces campeón del mundo seguirá vivo en los anales de la historia del motociclismo. Y no solo por sus títulos y números sin parangón, sino por su imán para atraer a aficionados a un deporte que catapultó.
Valentino Rossi supo abrir fronteras en el mundo del motociclismo y fue capaz de ser admirado desde su Tavullia natal donde escuchó de chico los motores del cercano Misano a toda Italia y más allá. Es un icono mundial y considerado por muchos el mejor piloto de la historia.
Como todo mito, no dejará de inmediato el ‘paddock’ sino que seguirá en el Mundial al frente de sus equipos y vigilando a sus pilotos de su propia academia. Como piloto puede que su futuro esté, como él mismo avistó, en las cuatro ruedas.
‘Il Dottore’ puso fin a su carrera este domingo tras 26 Mundiales a sus espaldas. Y lo hizo con nueve títulos mundiales en su poder: uno en 125cc (1997), uno en 250cc (1999) y siete en 500cc/MotoGP (2001, 2002, 2003, 2004, 2005, 2008 y 2009). Para un total de 115 victorias, 235 podios y 65 ‘poles position’ entre las tres categorías.
Con sus ‘tiffosi’ defendiéndolo a capa y espada en las múltiples gradas de los circuitos por los que pasó, ha tenido que hacer frente a grandes rivalidades en la pista que, en ocasiones, han pasado esa línea para convertirse en enemistades. Quizá la batalla más grande la vivió con su compatriota Max Biaggi, con quien pugnaba por ganarse la estima de los italianos antes incluso que por ganar el título de 500cc. Nadie duda de quién ganó ese duelo que tuvo en Suzuka (Japón), en 2001, el momento más tenso entre codazos de Biaggi y ‘peineta’ de Rossi.
Carácter no le ha faltado nunca a un Rossi que es un gran campeón por méritos propios pero al que siempre le ha perseguido la cierta fama de ser incapaz de olvidar trencillas, siendo quizá algo rencoroso. Que le pregunten a Sete Gibernau, quien tras denunciar a Rossi y su limpieza de parrilla se fue al suelo, a la siguiente cita, después de que el italiano jurara que el español no volvería a ganar una sola carrera.
Una ‘vendetta’ que también sufrió Marc Márquez, en un caso similar al de Sete aunque multiplicado. El muro que hizo poner entre los boxes del equipo oficial de Yamaha para evitar que su compañero Jorge Lorenzo le ‘espiara’ o sus duelos deportivos con Casey Stoner son otros momentos a recordar.
Con Rossi llegaron nuevos aficionados que, con su marcha, seguirán asiduos a las carreras. Su divertido carácter y su actitud positiva ha hecho crecer el cariño hacia las motos. Su conocido poder de atracción hizo que se enganchara la gente a las carreras y que Rossi fuera tan admirado o más como las estrellas de otros deportes más mediáticos.
‘Grazie, Vale’. ‘Ciao, Vale’.