De compras en un tanque
Un vecino de Amesbury (Reino Unido) realiza las tareas de la vida cotidiana con su familia en un carro de combate
Gary Freeland, vecino de Amesbury (Reino Unido), conduce un tanque hasta el supermercado para hacer la compra semanal de su familia. Y eso que llenar el depósito de combustible de su ‘utilitario’ le cuesta 941 euros.
Este hombre de 35 años es padre de tres hijos: Freddie (13 años), Phoebe (9) y Harrison (1). Y aficionado a los carros de combate desde que era muy joven. La pasión por los tanques le viene de su abuelo, que era propietario de vehículos militares, lo que le llevó a alistarse en el ejército a los 16 años, según informa el portal de Europa Press.
Gary Freeland y su familia hacen su vida cotidiana subidos en el tanque. Se gastó más de 20 mil libras esterlinas en el vehículo y lo utiliza en su día a día, lo que llama la atención de los lugareños cuando pasa por la gasolinera y lo aparca en el supermercado.