500 días a 70 metros bajo tierra
"Llevo un año y medio sin hablar con nadie, solo conmigo misma", dijo Beatriz Flamini al salir este viernes de una cueva en la que vivió aislada
La deportista Beatriz Flamini salió este viernes de la cueva. Allí pasó 500 días a 70 metros bajo tierra. Un ‘hogar’ ubicado a 10 kilómetros de Motril, ciudad ubicada en la provincia española de Granada.
«Llevo un año y medio sin hablar con nadie, solo conmigo misma», dijo a los periodistas al salir este viernes ayudada por un equipo de espeleólogos.
El objetivo de Flamini, quien se define como “alpinista, deportista de élite y escaladora”, era permanecer aislada en una cueva sola sin referencias de tiempo, sin noticias y sin contacto con el exterior.
La española, que calificó este desafío personal como “excelente e insuperable”, fue asistida nada más salir por una psicóloga y se sometió a un chequeo médico antes de comparecer ante la prensa.
La cueva está situada en las proximidades de la costa de Granada y tiene una altura de 12 metros y una superficie similar. Flamini sí pudo contar con una computadora y un router que le permitieron enviar textos y videomensajes. Y que a la vez servían a quienes la supervisaban para conocer el estado de la aventurera y sus necesidades.
En la cueva, Flamini tenía libros, luz artificial y cámaras para grabar su experiencia, aunque ningún instrumento para controlar el tiempo, y estuvo apoyaba por un equipo técnico que le dejaba comida sin tener contacto con ella.
«Yo no sé lo que ha pasado en el mundo. Para mí sigue siendo el 21 de noviembre de 2021, el primer día en la cueva», aseguró Flamini.
