La rebelión de los gobernadores
Los doce mandatarios estatales del PAN secundan en un comunicado la oposición al plan de seguridad de AMLO iniciada por Enrique Alfaro, gobernador electo de Jalisco por Movimiento Ciudadano. Rechazan estar supeditados a los 'superdelegados' y se consideran "meros invitados" en el organigrama federal
Los gobernadores del PAN unen fuerzas para oponerse en bloque al plan de seguridad de AMLO. Se consideran «meros invitados» en el futuro organigrama federal y exigen más competencias cualitativas y cuantitativas en la lucha contra el crimen.
Los 12 gobernadores del Partido Acción Nacional (PAN) mostraron su rechazo a la figura de los coordinadores estatales, los llamados ‘súper delegados’, una figura creada por el Congreso de la República gracias a la aplastante mayoría de Morena en la Cámara.
«Ese desdén es inaceptable para nosotros, porque no solo pone en riesgo nuestros objetivos sino resulta inconcebible una solución del fondo a la solución de inseguridad y delincuencia en el país sin la concurrencia efectiva de los Gobiernos Estatales», señalaron los mandatarios estatales de Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Nayarit, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Tamaulipas y Yucatán.
«Resolver los problemas requiere conocimiento del territorio, cercanía de la población y atención a las peculiaridades de cada región», aseguran los 12 gobernadores del Partido Acción Nacional
El PAN considera que acompañar al Gobierno de López Obrador no significa someterese a sus órdenes en temas locales. «El país se construye de abajo hacia arriba, desde el espacio local… No se impone desde el centro«, asegura el comunicado de los gobernadores panistas, que siguen así la estela de Enrique Alfaro, gobernador electo de Jalisco, la tercera entidad más importante de México, y que fue el primero en rechazar el control del presupuesto que propone Andrés Manuel López Obrador.
Alfaro se quejó de los coordinadores estatales o ‘superdelegados’, una figura creada por el Gobierno de López Obrador para controlar en los 32 Estados los programas y las políticas dictadas desde la Ciudad de México.
En una carta dirigida al presidente electo, los doce gobernadores del PAN afirmaron estar abiertos a cooperar con las autoridades federales con ciertas condiciones. «Resolver los problemas requiere conocimiento del territorio, cercanía de la población y atención a las peculiaridades de cada región. Las prioridades regionales deben definirse de manera conjunta, considerando las condiciones peculiares de cada entidad federativa”, aseguran en su escrito.
